Indulgencia Plenaria ofrecida aquí en nuestro Pesebre de Navidad hasta el 2 de febrero.

Ocho siglos después de que San Francisco de Asís creara el primer pesebre en Greccio, Italia, el Papa Francisco ha concedido Indulgencia Plenaria para "visitar las iglesias regentadas por familias franciscanas en todo el mundo y detenerse en oración ante los pesebres allí instalados."  El Obispo Golka ha confirmado a nuestra parroquia como una de ellas.

¿Qué es una indulgencia?  Aunque los pecados confesados y perdonados nos devuelven la gracia, las consecuencias permanecen en la tierra o en el purgatorio. Una indulgencia le libera de esas consecuencias.  Una indulgencia parcial cubre parte de la pena debida por los pecados; una indulgencia plenaria la elimina toda.  Ambos tipos de indulgencia proceden de los méritos de Jesús, de la Virgen María y de los santos.  Para conceder las indulgencias, la Iglesia recurre a un gran tesoro de méritos: el valor infinito de la Pasión, muerte y Resurrección de Cristo, y las oraciones y buenas obras de la Santísima Virgen María y de los santos, incluidos todos los que en la tierra viven santamente.

La Indulgencia Plenaria puede obtenerse aquí, ante nuestro Pesebre de Navidad, hasta el 2 de febrero, en las condiciones habituales (Confesión Sacramental, Santa Comunión, Oración por el Papa y desprendimiento de todo pecado).  Los enfermos y los que no pueden participar físicamente también pueden recibir la indulgencia plenaria ofreciendo sus sufrimientos al Señor o realizando prácticas de piedad.

¡Feliz Navidad a todos!  

San Francisco de Asís, ¡ruega por nosotros!